jueves, 16 de mayo de 2019

Sonata para piano en mi bemol menor

Primer movimiento: Andante

LA última vez que me tocaste fue el ocho de julio. Lo recuerdo perfectamente porque esa fecha es especial para mí. Lo celebro cada año como una fiesta personal, y tu siempre vuelves a casa. Es el día de tu cumpleaños, el día que te conocí. Aquel día te acercaste a mí por primera vez entre tembloroso y emocionado, y cuando posaste tus manos sobre mí, supe que sería tuyo para siempre.

SI dejo de sentir tu tacto, tu voz, tu mirada sobre mí, comienzo a morir... es una muerte lenta, tremendamente dolorosa. Mi cerebro busca la forma de engañar a mi cuerpo, inventa mil y una excusas para justificar tu ausencia, pero el cuerpo no es tonto, siente y acumula la soledad. Ésta se convierte en dolor que se transforma en rabia, y con el tiempo se diluye en tristeza. El cuerpo, en silencio, sabe...

DÓnde estás es una incógnita, la vida te trae a mí y te lleva sin pedir permiso, sin consideración, sin atender a mis deseos ni mis necesidades. Tú vienes y vas, y yo me limito a esperar.

REcuerdo el movimiento de tus manos es esos periodos de ausencia. Siempre comienzas recorriendo mis curvas más cerradas, y así comienza el juego. Percibo enseguida tu estado de ánimo, y se si he de ser dulce o agresivo, si he de ser coqueto o ignorarte. Sé cómo estás, por la forma en que me tocas, tus dedos me dicen si estas alegre o rabioso, si necesitas descargar tu furia en mí, o compartir la serenidad que te inunda solo en contadas ocasiones. No son tus ojos los que me hablan, sino tu voz y tus manos.

MI cuerpo se doblega a tus caricias, y sabe seguirte el ritmo hasta que el movimiento nos acaba fundiendo en uno, y hace que la música inunde mi ser, llevándonos al más profundo éxtasis. Me convierto en ti, siento todo lo que sale de tu alma. Te siento en el sonido que invade el espacio, te siento en el aire, te siento dentro de mí hasta lo más profundo, lo inundas todo... y podría seguir ese ritmo indefinidamente, hasta morir de agotamiento!

FAltan tres días para tu cumpleaños, y sigo sin saber nada de ti. Casi un año ya... Nunca habías tardado tanto en volver a mí. Sé que las giras a veces se alargan y te retienen lejos, y se también que tengo mis luces y mis sombras... A veces te ríes de mí por eso, siempre dices que todo en mí tiene que ser blanco o negro, que no tengo grises... que cuando me tocas, puedes saltar en mí de la claridad más absoluta a la oscuridad más fría. Pero siempre has alabado esa cualidad en mí.

SOLo espero tu regreso...

Segundo movimiento : Allegro

LAte mi corazón "prestissimo" porque sé que hoy voy a volver a verte y estaré contigo una buena temporada. Deslizo mis dedos sobre ti, percibo tu frialdad, proporcional al tiempo que hemos estado separados, pero con mi constancia y mis movimientos, suaves al principio como requiere la delicadeza de tu cuerpo, pero más enérgicos y atrevidos poco a poco, tal como es propio de mi naturaleza, consigo derretir esa capa de hielo pétreo tras la que siempre te encuentro cuando hace tiempo que no nos reunimos. Luego llega el ir desgranando con paciencia, aunque he de reconocer, que a partir de un momento dado, cada vez con más urgencia, todas esas capas que cubren tu ser hasta llegar a tu esencia.

SIento que tras haber superado todos esos mantos protectores, he conseguido llegar a tu centro. Ese momento me hace sentir como uno de esos antiguos exploradores que llegando a tierras desconocidas, y tras arriesgarse en un periplo lleno de peligros inesperados, horadan una tierra virgen en la que descubren el ansiado y esperado tesoro que les impulsó a iniciar su viaje.

DOmino mis impulsos para adecuarme a tu ritmo, y cuando consigo llegar verdaderamente a ti, me fundo contigo, y ya no hay nada en el universo que consiga despegarme de tu lado. El tiempo pasa demasiado rápido cuando estoy en tu mundo, y nadie entiende como puedo aguantar horas y horas trabajando y disfrutando contigo, sin sentir el más mínimo cansancio. No saben... no entienden que en esa fusión, me transmites tu infinita energía que proviene de los pozos más hondos, de los rincones más oscuros, de las naturalezas mas desdichadas, de mil amores fallidos, y de los más profundos dolores y alegrías del alma humana .

REnegando de todo, y exigiendo tiempo para ella, la que menos lo entiende es mi mujer, que al principio soportaba tu presencia como un mal necesario, pero poco a poco comenzó a rechazarla, hasta mostrar un odio descarado. Quizá porque intuía la conexión que hay entre nosotros y que jamás he llegado a tener con ella por mucho que  haya intentado seducirme de mil y una maneras.

Mi mujer, la que presento en sociedad, jamás ha entendido mi necesidad de seguir contigo una vez resueltos los asuntos básicos y cotidianos que nos unen por trabajo. Creo que no podría ni intuir lo que siento...

FAlta pasión en su vida, porque no la hay en su corazón. Es incapaz de trascender el mundo real, ese en el que se mueve la mayoría de la gente, el de los asuntos mundanos, ya sabes,... Me recrimina que vivo en otro mundo, aunque este le reporta una vida fácil y cómoda.

SOLicita mi presencia para los asuntos más absurdos..." Cari, ayúdame a decidir de que color ponemos las cortinas nuevas... te gusta éste blanco roto?" Y el único roto que yo veo es el del sonido que se acaba de paralizar... He intentado acercarla a tu mundo, pero parece una tarea imposible. Creo que lo único que le importa realmente es el dinero que puedo aportarle, o la aparente sensación de poder que le confiere aparecer a mi lado en las fotos de las revistas...

Tercer movimiento: presto

- LA próxima vez te quedas tú de guardia…
- SIlencio! no puedo verlo con vuestra conversación!
- DÓnde lo ubicabas?
- REpite ese último movimiento, ¡vamos! Cuando lo haces reaparece.
- MIra, ahí está.
- FAlta poco para llegar, casi lo tienes.
- SOLo aguanta ahí, lo tengo, lo tengo, creo que podré eliminarlo. Qué sucede, la presión se desploma, de donde sale esa sangre?

- LA mujer está fuera, ¿quién se lo dice?
- SIento mucho comunicarle que su marido acaba de fallecer en el quirófano

Cuarto movimiento: Largo

DÓnde está mi bolso de Vuitton? Hoy tengo que aparecer impecable en la entrevista de la tele. Imagínate, la desconsolada viuda del mejor pianista de este siglo!
REcuerda que a las 6 vienen los de la mudanza.
MI marido no se lo creería...
FAlta poco... sabía que algún día lo conseguiría.
SOLamente espero que arda lentamente.
LA verdad, estaba harta de él. Vaya, está lloviendo...
SÍ, tenía que ser un día así, triste, para llevarle la contraria a la alegría que siento: hoy por fin voy a deshacerme del maldito piano...

1 comentario:

  1. Uf, qué fuerza ! Qué bien describes ese potencial, casi parece utópico, de la energía sexual bien canalizada y compartida. Una sexualidad fresca, sin barreras, desafiante e insolente socialmente, al "realizar" su honestidad con nuestra propia naturaleza y nuestro SER (lo ilimitado es y ha sido siempre repudiado por la sociedad... actual y pasada).

    Cómo te lleva, paso a paso, a conectar profundamente con otra persona. Qué amor más profundo sugiere esa atención al otro. Esa adaptación a sus ritmos, con la obligada e hiriente transcendencia de nuestras propias pasiones, para así, poder darles rienda suelta desde lo más profundo.

    Y qué razón tiene al recalcar que nada se puede controlar, que La naturaleza, el cuerpo ... siente, y que la mente, por mucha voluntad que le pongamos, no puede llegar allí a donde nuestra naturaleza, nuestro SER, nos lleva (si osamos seguirle).

    Y luego, por supuesto, la mezquindaz aparece, esa amiga que nos recorre a todxs. Y hace lo que hace siempre tan bien, destruir, separar ... matar. Y lo que era tan cósmico, delicado, salvaje y conectado a nuestro SER, se convierte en algo superficial, artificial, egocéntrico e intolerante.

    SilK, gracias por describir tan bien y con tan pocas palabras, las dos caras de la moneda, tan dolorosamente unidas como el día y la noche. Del gozo más absoluto nos haces pasar a la mediocridad más terrible... la vida misma.

    Gracias amiga mía, tienes un alma que no te cabe en ese cuerpo.

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